Construyendo un mejor futuro para todos
Durante décadas, las vacunas han tenido un impacto sin precedentes en la salud pública global y siguen siendo uno de los métodos más eficaces para prevenir enfermedades infecciosas en todo el mundo.
Este año, la Organización Mundial de la Salud (OMS) seleccionó el tema “Larga vida para todos” como el motivo central de la celebración anual de la Semana Mundial de la Inmunización, y con una buena razón.1 Las vacunas no solo ayudan a prevenir la posibilidad de contraer enfermedades a lo largo de la vida, sino que también cumplen un papel primordial, al ayudar a extender las vidas de las personas, quienes, como resultado, pueden ser partícipes de momentos importantes, experimentar relaciones y disfrutar las satisfacciones que surgen de ellas.
El enfoque resolutivo de Janssen respecto del desarrollo y la implementación de vacunas se basa en nuestro legado de reducir el impacto de las amenazas para la salud mundial, como el COVID y el ébola,2 para que las comunidades de todo el mundo puedan alcanzar sus años dorados con buena salud.
Estoy encantada de estar trabajando con algunos de los científicos más talentosos mientras abordamos las áreas donde todavía resta mucho trabajo por hacer. Nuestra misión final es la de ofrecer un proceso de evolución de las vacunas que tenga sus raíces en la ciencia y la humanidad.
Aquí les presento tres formas en las que estamos realizando esto:
Mejora del acceso a través de alianzas globales. Incluso las vacunas más efectivas solo pueden tener éxito cuando las personas que las necesitan pueden acceder a ellas cuando y donde sea. Uno de los pilares principales de nuestra empresa, el cual surgió producto de nuestra batalla contra la pandemia de COVID-19, es el de garantizar el acceso equitativo a las vacunas, con el objetivo de desarrollar y distribuir una vacuna que ayude a proteger la salud de todos, en todas partes. Para ayudar a incrementar el acceso a la vacunación, en particular en los países de ingresos bajos y medios a bajos, firmamos un acuerdo con el gobierno de los Estados Unidos y Gavi, la Alianza para la Vacunación, para permitir el acceso a nuestra vacuna contra la COVID-19 a través de un mecanismo novedoso, para proteger a las poblaciones más vulnerables del mundo. El mecanismo COVAX Humanitarian Buffer es parte del Fondo de Acceso Global para Vacunas contra la COVID-19 o COVAX y está diseñado para garantizar que las personas que se encuentran en zonas de conflicto o entornos en crisis humanitaria puedan acceder a vacunas contra la COVID-19, incluso cuando quedan fuera del alcance de las campañas gubernamentales de vacunación tradicionales.
Redefinición de soluciones para abordar las amenazas mundiales que generan más muertes. En la búsqueda de soluciones que podrían tener un impacto positivo en todo el mundo, debemos tener en cuenta el potencial de las vacunas para desempeñar un papel clave, junto con otras medidas de salud pública e intervenciones clínicas. Por ejemplo, un estudio reciente de The Lancet demostró que las infecciones generadas por la resistencia a los antibióticos (AMR, por sus siglas en inglés) se encontraban entre las causas principales de muerte de personas de todas las edades, y que provocaban más muertes que el VIH/SIDA o la malaria.3 Sin embargo, debido a la falta de un control adecuado de la AMR en varias partes del mundo, es probable que el impacto sea aún mayor.
Si bien el enfoque respecto de la AMR a menudo es el de reducir el uso de antibióticos en hospitales y otros entornos de la salud, las vacunas también pueden desempeñar un papel muy importante, ya que su efectividad es mucho más prolongada y existe una probabilidad menor de que surja la resistencia en comparación con los antibióticos.4 En Janssen, nuestra prioridad es "superar la AMR", y nuestra empresa es una de las pocas que prioriza el desarrollo de vacunas para proteger a las personas de los patógenos bacterianos más letales del mundo, incluidos los dos principales culpables de la crisis global de AMR: el patógeno extraintestinal denominado Escherichia coli (ExPEC) y el Estafilococo áureo (S. aureus).4,5 La prevención o reducción de enfermedades por medio de la vacunación podría reducir de manera significativa el uso de antibióticos y, en consecuencia, reducir la prevalencia de la AMR.
Expansión de la definición de “Enfermedades prevenibles por vacunación”. Por último, mientras celebramos los avances que hemos logrado, no debemos perder de vista que la definición de “enfermedad prevenible por vacunación” se encuentra en evolución constante y que los avances en ciencia y tecnología nos ofrecerán un abanico extenso de posibilidades. Un gran ejemplo de esto es el virus sincitial respiratorio (RSV, por sus siglas en inglés), un virus respiratorio altamente contagioso que afecta a más de 64 millones de personas en todo el mundo en un año normal.6 Los adultos mayores se encuentran entre los que corren un mayor riesgo de tener problemas de salud graves, y no existen en la actualidad vacunas o medicamentos antivirales para el RSV.7 Teniendo en mente las necesidades sin satisfacer de esta población, la vacuna candidata para adultos contra el RSV de nuestra empresa está siendo estudiada en adultos mayores de 60 años, para constatar si puede evitar que esta población sufra complicaciones que ponga sus vidas en riesgo, como la neumonía, la bronconeumonía y la bronquitis. Esta vacuna ha recibido la designación de terapia innovadora por parte de la Administración de Medicamentos y Alimentos de EE. UU. (FDA, por sus siglas en inglés) y la designación PRIME de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés).
Es más importante que nunca garantizar que las vacunas sigan siendo efectivas, que se encuentren disponibles y que no perdamos de vista su gran potencial que aún resta explorar. Nuestro conocimiento de la ciencia de las vacunas, junto a una ola de innovación biotecnológica de vanguardia, me llena de esperanza y optimismo sobre el futuro del tratamiento de enfermedades infecciosas. Si seguimos promoviendo las alianzas, explorando nuevas soluciones y garantizando que la innovación se mantenga en una trayectoria ascendente, podremos mantener la confianza en nuestra habilidad para construir un mejor futuro para todos en lo que respecta al tratamiento de las enfermedades infecciosas, y ayudar a las personas a mantenerse saludables en y a lo largo de sus años dorados.
18 de abril de 2022
Referencias
- Semana Mundial de la Inmunización 2022. (2022). Organización Mundial de la Salud. Consultado el 31 de marzo de 2022 en https://www.who.int/campaigns/world-immunization-week/world-immunization-week-2022.
- Creación de tratamientos contra enfermedades infecciosas. (n.d.). Janssen Global Services, LLC. Consultado el 30 de marzo de 2022 en https://www.janssen.com/infectious-diseases-and-vaccine
- Murray, C. J., et. al. (2022). Global burden of bacterial antimicrobial resistance in 2019: a systematic analysis. The Lancet, 399(10325), 629–655. https://doi.org/10.1016/s0140-6736(21)02724-0
- Micoli, F. et al. (2021). The role of vaccines in combatting antimicrobial resistance. Nature Reviews Microbiology, 19(5), 287–302. https://doi.org/10.1038/s41579-020-00506-3
- Organización Mundial de la Salud (27 de febrero de 2017). La OMS publica una lista de bacterias para las que se necesitan de manera urgente nuevos antibióticos [Comunicado de prensa]. https://www.who.int/news/item/27-02-2017-who-publishes-list-of-bacteria-for-which-new-antibiotics-are-urgently-needed
- Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (12 de diciembre de 2008). Virus sincitial respiratorio (RSV) Consultado el 28 de marzo de 2022 en https://www.niaid.nih.gov/diseases-conditions/respiratory-syncytial-virus-rsv
- RIVM (21 de julio de 2021). RS-virus | RIVM. Instituto Nacional de Salud Pública y Medio Ambiente. Consultado el 31 de marzo de 2022 en https://www.rivm.nl/rs-virus